Hace casi un mes publicamos un análisis técnico sobre IOTA (MIOTA), la criptomoneda que ganó la votación semanal en ese momento. Hoy hemos querido actualizar su situación ya que se ha cumplido exactamente lo que os comentamos en dicho análisis. La precisión ha sido muy alta.
Para aquellos que no lo recordéis, a continuación os citamos una pequeña parte de este análisis: debemos estar atentos al cierre de la vela diaria respecto a la línea de tendencia. Si cierra por debajo, una caída hasta el primer soporte tiene una alta probabilidad. No solamente la caída se produjo justamente en los días siguientes al análisis, si no que IOTA rebotó de forma exacta en el soporte que habíamos estudiado.
Este mismo rebote fue el que confirmó la rotura a la baja ya que el precio subió hasta tocar con gran exactitud la línea de tendencia que había roto. Cuando ocurre esto, ya sea al alza o a la baja, decimos que la rotura se ha confirmado. El hecho de que haya rebotado en el soporte y que se haya confirmado la rotura nos dice lo siguiente: la zona de soporte y la línea de tendencia están bien definidas y, además, estamos interpretando correctamente lo que está ocurriendo.
Ahora tenemos el precio de IOTA de nuevo en la zona de soporte que hemos estudiado. ¿Qué podemos esperar? En esta ocasión IOTA ya no depende enteramente de ella misma, ahora está a merced de lo que haga Bitcoin. Eso sí, debemos tener muy presente que cuantas más veces el precio rebote en un soporte, menos fuerza tendrá y, por lo tanto, la posibilidad de romper a la baja va en aumento.
Concluyendo el análisis, tenemos un ojo puesto en lo que haga Bitcoin y otro en lo que haga IOTA. De momento sabemos que ha caído por segunda vez al soporte y que, si este es roto a la baja, la probabilidad de una caída hasta el segundo soporte es muy alta. Os mantendremos informados.
Recordamos que la información aquí expuesta tiene carácter informativo exclusivamente, y en ningún momento constituye un consejo de inversión.
Para aquellos que no lo recordéis, a continuación os citamos una pequeña parte de este análisis: debemos estar atentos al cierre de la vela diaria respecto a la línea de tendencia. Si cierra por debajo, una caída hasta el primer soporte tiene una alta probabilidad. No solamente la caída se produjo justamente en los días siguientes al análisis, si no que IOTA rebotó de forma exacta en el soporte que habíamos estudiado.
Este mismo rebote fue el que confirmó la rotura a la baja ya que el precio subió hasta tocar con gran exactitud la línea de tendencia que había roto. Cuando ocurre esto, ya sea al alza o a la baja, decimos que la rotura se ha confirmado. El hecho de que haya rebotado en el soporte y que se haya confirmado la rotura nos dice lo siguiente: la zona de soporte y la línea de tendencia están bien definidas y, además, estamos interpretando correctamente lo que está ocurriendo.
Ahora tenemos el precio de IOTA de nuevo en la zona de soporte que hemos estudiado. ¿Qué podemos esperar? En esta ocasión IOTA ya no depende enteramente de ella misma, ahora está a merced de lo que haga Bitcoin. Eso sí, debemos tener muy presente que cuantas más veces el precio rebote en un soporte, menos fuerza tendrá y, por lo tanto, la posibilidad de romper a la baja va en aumento.
Concluyendo el análisis, tenemos un ojo puesto en lo que haga Bitcoin y otro en lo que haga IOTA. De momento sabemos que ha caído por segunda vez al soporte y que, si este es roto a la baja, la probabilidad de una caída hasta el segundo soporte es muy alta. Os mantendremos informados.
Recordamos que la información aquí expuesta tiene carácter informativo exclusivamente, y en ningún momento constituye un consejo de inversión.
Efectivamente, tal y como decíamos, IOTA ha caído hasta la segunda zona de soporte que habíamos marcado. El RSI ha entrado en sobreventa en el gráfico diario, por lo que es posible que veamos un enfriamiento de la caída en este punto.